Cáritas recibirá 109 millones de euros del Fondo Social Europeo para mejorar la inserción sociolaboral de las personas en exclusión social

  • Duplica el anterior POISES y garantiza la estabilidad presupuestaria de los programas de empleo y economía social para los próximos seis años

De acuerdo con la resolución definitiva de la Secretaría de Estado de Empleo y Economía Social, del Ministerio de Trabajo y Economía Social de la convocatoria del Fondo Social Europeo Plus (FSE+), Cáritas ha recibido una asignación total de 109.284.500,01 euros para favorecer la inserción socio-laboral de las personas en situación o riesgo de exclusión social con un periodo de ejecución del 1 de octubre de 2023 al 31 de octubre de 2029.

Esta financiación viene a dar continuidad a las actuaciones financiadas por el anterior POISES (Programa Operativo de Inclusión Social y Economía Social) y duplica prácticamente la concesión recibida para el periodo FSE 2014-2020, lo cual garantiza   la estabilidad presupuestaria de los programas de empleo y economía social de la Confederación durante los próximos seis años.

Apuesta clara

“La Confederación está haciendo una apuesta clara por aumentar los proyectos de economía solidaria para acompañar a las personas en situación de exclusión en recorrer un camino más digno hacia su autonomía personal y familiar. Es cierto que estas iniciativas vinculadas al empleo y la economía social requieren más inversión económica, pero no es menos cierto que también son más efectivas a largo plazo y tienen un efecto más recuperador de la persona y de su entorno”, asegura el director de Acción Social de Cáritas Española, Félix Miguel Sánchez.

Los fondos serán invertidos en programas de inclusión social con el objetivo de promover la igualdad de oportunidades para el acceso a un empleo digno (47,7 millones de euros), en proyectos de formación (33,8 millones de euros), y en programas de economía social para generar oportunidades reales de trabajo (19,7 millones de euros). El 7,3% restante (unos 8 millones de euros) irán destinados a programas de inclusión en las Islas Canarias.

“Como sociedad, cada recurso invertido en programas de capacitación profesional y de acceso al empleo conlleva un retorno en el medio y largo plazo tanto desde la dimensión social como desde el ámbito de económico. A través de estos programas las personas ganan en autoestima, en reconocimiento social y en acceso a derechos, y además contribuyen de un modo activo al desarrollo económico común a través de su contribución en impuestos y en consumo”, subraya el director de Acción Social.

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